IN LAK'ECH: busca salvar al ser humano y a los demás.

             IN LAK'ECH: busca salvar al ser humano y a los demás.

 

Los hombres se dividen en dos bandos:

los que aman y fundan,

los que odian y deshacen.

José Martí 

 

Para el ser humano, no hay peor muerte en vida, es que el mismo pierda totalmente la esperanza. 

El escritor polaco Stanislaw Lem, mencionaba en un pensamiento acerca del ser humano: El ser humano ha emprendido el viaje en busca de otros mundos, otras civilizaciones, sin haber conocido a fondo sus propios escondrijos, sus callejones sin salida, sus pozos o sus oscuras puertas atrancadas. 

Cuando pensamos en la humanidad, cuando pensamos quienes son nuestros semejantes, el prójimo, estaremos pensando en todos los seres humanos nacidos en esta nuestra Madre Tierra. 

Una sola defunción o perdida de un ser humano, debiera ser de luto para la humanidad entera, porque la sola perdida de uno solo de nosotros de esta brava y galante banda de hermanos que somos los humanos, es una perdida para todo el ser humano decente donde quiera que viva en esta nuestra Madre Tierra. 

Y esta reflexión va por aquellos que han creado virus para matar al ser humano, va para aquellos que han creado guerras fratricidas para eliminar seres humanos, va para todos aquellos que han dejado morir de hambre al prójimo, va para todos aquellos corruptos y malvivientes que son tan pobres que solo tienen sus millones o sus miles de millones.

Va para todos aquellos que solo piensan en sí mismos, pero jamás han pensado en la humanidad como sus prójimos, así de egoístas han sido y lo son aún ahora.

Pero han olvidado algo, como lo decía Friedrich Hegel: 

Los hombres no son sino los

instrumentos del genio del universo. 

Para cualquier persona, el ser humano debe ser muy importante y muy valioso. 

Hablando del ser humano, este no vale lo mismo en todo el mundo, porque para un ser humano de un país empobrecido, de los países llamados del tercer mundo, es diferente que en un país de los llamados “desarrollados”; para los países primer mundistas, el ser humano de un país empobrecido, es un estorbo, solo son seres humanos que pueden ser sacrificados por los países de primer mundo o por sus malos gobernantes enriquecidos a costa del pueblo o en guerras que no son suyas, sino son fratricidas para acabarlos. 

Para los países desarrollados, una persona desde su nacimiento, no tiene el mismo valor que el de una persona en su vida madura, porque este último contribuye como mano de obra, en la creación de riqueza y el mundo se acerca peligrosamente a un peligro inminente por el envejecimiento de la población en los países desarrollados, cuando tomen en cuenta esto, no habrá personal joven para la mano de obra y los sistemas de pensiones del mundo, no valdrán nada y no habrá gobierno que atienda a sus adultos mayores, por la falta de dinero gubernamental. 

Si hablamos de los seres humanos no nacidos, estos no valen nada para los abortistas asesinos. 

Si hablamos de un ser humano enfermo o en su vida de envejeciente, no vale lo que un ser humano sano, la vida de un ser humano enfermo, vale solamente si tiene dinero para curarse o pagar por un tratamiento que lo cure o le alargue la vida. 

La vida de un ser humano en un país violento, no vale nada, cuando es un estorbo para los gobernantes tiranos, porque vale más un ser muerto que no reclama nada. 

Para un país demócrata, un ser humano vale exactamente, UN VOTO. 

Para los políticos, el ser humano más peligroso, es el que pide que los políticos gobernantes lleven esperanza de un futuro mejor a su población.

Sófocles dijo: Muchas cosas hay portentosas, pero ninguna como el hombre. Tiene recursos para todo; sólo la muerte no ha conseguido evitar.

Hagamos realidad lo que estamos destinados a ser. Felices.

Hagamos actos de bondad y de amor. Debemos hacerlas diariamente para generar energía positiva y Luz.

Somos seres humanos con un alma inmortal en un cuerpo finito.

Vamos a encontrar la felicidad cuando estemos en paz con nosotros mismos, con los demás y con el planeta.  

Jamás tengas miedo. 

No estás solo, Gilbert Keith Chesterton decía en una frase: A algunos hombres los disfraces no los disfrazan, sino los revelan. Cada uno se disfraza de aquello que es por dentro.

Así que tú, ser humano nacido en esta nuestra Madre Tierra, se lo que estas destinado a ser desde tu nacimiento, ama y haz feliz a la gente que te rodea siempre.

Cuida y vela por tus semejantes, por tu prójimo, porque tu eres prójimo también de los demás.

Esta es nuestra misión y somos la esperanza del ser humano.  

Se feliz, tu felicidad está dentro de ti y tu alma. 

Recuerda que lo imposible solo es el límite de los que no sueñan.
Ama y vive, no solo estés viendo lo que sucede, actúa ya.

Es tu deber y responsabilidad como ser humano. 

Si le preguntas a una mujer enamorada cuánto vale su hombre, te dirá que vale tanto, como para caminar juntos de la mano el resto de su vida. 

Si le preguntas a un hombre cuánto vale una mujer, te dirá que ella vale todo, solo viendo el futuro en la mirada de ella.

T. S. Eliot mencionaba: Los hombres viven del olvido; las mujeres, de recuerdos. 

Para el Creador, valemos mucho, porque fuimos hechos “a su imagen y semejanza”. 

ESTE ES NUESTRO REAL VALOR, es tu valor real.

Nuestro camino es trascender, en el amor a los demás.

Somos la resistencia contra la oscuridad. 

Vive tu vida con AMOR y da amor a los demás.

Todo acto de amor es un acto de resistencia contra la oscuridad; todo acto de amor es un acto de darse… es un acto de generar energía para todos los demás.

Todo acto de amor es un acto de paz, de paz interior, de paz en la conciencia.

Todo acto de amor es un acto ganador, en la PAZ no hay ganadores ni vencidos.

Bienvenida la Luz y un nuevo amanecer para la humanidad. 

No tengas miedo jamás. 

Te has sentido solo pero nunca has estado solo. 

Nuestro camino es trascender, en el amor a los demás. 

Para mi banda de hermanos: IN’LAKESH. 

Autor: Manuel Villarreal 

 

“Non nobis, Domine, non nobis, sed Nomini Tuo da gloriam” 

“No a nosotros, Señor, no a nosotros, sino a Tu nombre, da la gloria”