Esperanza para el ser humano

Esperanza para el ser humano
Lo pequeño es hermoso

lunes, 26 de febrero de 2018

La verdad, Tu verdad, mi verdad


La verdad, Tu verdad, mi verdad
         
Cuando la verdad sea
demasiado débil para defenderse,
tendrá que pasar al ataque.
Bertolt Brecht

La falacia o el paradigma del sistema económico internacional continúa vigente hasta hoy día.
Sabemos que la mayoría de los países y sus poderes, están en una encrucijada acerca de qué hacer para mantener sus prebendas y canonjías como lo han sido hasta ahora.
Hay luchas secretas para seguir ocultando la verdad a la gente de esta Madre Tierra y continúan propagando sus mentiras bajo las políticas que le interesan a la gente y la protegen.

¡MENTIRAS OTRA VEZ!

Con tantos siglos a hombros, la humanidad ya ha evolucionado para ser capaz de soportar la verdad, por más insensible y absurda que sea.
Hermann Hesse lo mencionaba de la siguiente manera: Hay millones de facetas de la verdad, pero una sola verdad.

¿Cuál es esa verdad ahora?

Tagore mencionaba, La verdad no está de parte de quién grite más”, y la humanidad sigue soportando a los merolicos que nos venden estiércol en vez de bienes duraderos; seguimos creyendo en los productos milagro en vez de a una ciencia liberada del control y el ocultismo de los poderosos, que nos brinde descubrimientos necesarios para erradicar para siempre las enfermedades.
Necesitamos científicos comprometidos con el ser humano, con la verdad y no comprometidos con los que manejan los hilos de las marionetas.
El sistema de salud mundial, manejado por las “farmafias”  que controlan lo que ellos quieren, que nos dan medicamentos para combatir enfermedades creadas por ellos o por los militares para hacer genocidios conscientemente; siempre han buscado eliminar a la población para no llevarla a cuestas.
La falacia o el paradigma del sistema económico internacional continúa vigente hasta hoy día; y el ser humano normal está de nuevo como hace siglos, bajo el yugo de unos cuantos que solo quieren mantener su status quo.

Son los hijos de los hijos de los hijos de los subyugadores originales y aún quieren mantener ese poder que ya perdieron hace mucho tiempo porque las comunicaciones han hecho que la venda de los ojos del ser humano, haya caído y hoy ya no pueden mantener subyugado y dormido al ser humano nacido en esta Madre Tierra.

Para difundir la Luz debemos estar en posición de poder ser la vela que hace la Luz o el espejo que la refleja.
En donde te encuentres hoy, mañana, al día siguiente, recuerda que donde estés, a donde vayas, lleva siempre en tu corazón esa luz propia que es generada por ti. Lleva tu propia luz y no esperes encontrar otra más fuerte que la tuya.

Tú eres el que hace que las cosas pasen o no, tú eres el que habla las cosas o no, eres tú mismo el que construye su propio éxito o fracaso en esta vida.
Este es el propio destino y desafío individual y colectivo de cada ser humano.

La meta del ser humano es hacer actos de amor y actos de bondad, que se muestre en cada uno de los seres humanos la fortaleza, la voluntad y el compromiso por salir adelante y ayudar a los demás.

Recuerda que un ser humano es igual a otro ser humano.
Yo soy otro tú y tú eres otro yo.

El ser humano necesita esperanza y libertad, paz y bienestar, nuestro camino es trascender como seres humanos, en el amor a los demás y en el amor a nuestra Madre Tierra.

En las escrituras budistas hallamos frases como la siguiente: “Más grande que la conquista en batalla de mil veces mil hombres es la conquista de uno mismo”.

Ser humano es tiempo de que trabajes en ti mismo para poder ayudar a los demás.
Es tiempo de que razones y sepas conscientemente que YO SOY OTRO TU Y TU ERES OTRO YO.

El abismo del miedo, el dolor, el engaño está dentro de ti.

Resuelve tus miedos, caricia la Luz y no la oscuridad, no te dejes llevar por palabras vanas de falsos embaucadores.

Goethe pone en boca de Fausto: “Todas las cosas se funden en el todo, y cada una de ellas vive y opera en las demás”. 

Todos estamos en la Madre Tierra. Nadie va a venir a ayudarnos, lo que hagamos por nosotros mismos es lo que nos ayudará a tener un futuro de verdades y esperanza.
Solo tú mismo haces la diferencia.

El ser humano es energía y nuestro camino es trascender como seres humanos, en el amor a los demás.


Para mi banda de hermanos: IN’LAKESH

Autor: Manuel Villarreal

Lo siguiente es tomado de: https://www.pasadofuturo.com/72nombresdedios.htm

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Decir lo que piensas
                                             
                   HEI                    TAF                NUM

Cuando necesitamos decir la verdad pero lo encontramos difícil, utilicemos este Nombre tan pronto como nuestro corazón comience a latir rápidamente. De la misma manera, cuando necesitemos abrirnos a duras verdades acerca de nosotros mismos, usemos este Nombre en el mismo instante en que nos pongamos a la defensiva.
Es difícil ser amorosamente honesto con otros. Cuando surge una oportunidad para confrontar a alguien con la verdad, nos encerramos; nuestros corazones se aceleran y la adrenalina se libera ante la mera posibilidad de decir lo que pensamos.
El miedo a decir o escuchar la verdad es el obstáculo más grande al que nos enfrentamos en nuestro deseo de experimentar relaciones que sean genuinamente satisfactorias, honestas y amorosas. Cuando nos guardamos algo, ese "algo" nos separa de la otra persona. Si no estamos abiertos a escuchar las palabras de otros sin reaccionar o tomarlas personalmente, nos distanciamos de esos individuos.
Siempre es más fácil decirle a la gente lo que desea escuchar. Con frecuencia, es más cómodo estar de acuerdo con alguien, incluso si en nuestros corazones no estamos de acuerdo. Y ya que puede ser igualmente atemorizante confrontar realidades dolorosas acerca de nosotros mismos, nuestros amigos y nuestra familia pueden sentirse obligados a decirnos sólo lo que nosotros queremos oír.

Meditación

Cuando necesitamos decir la verdad, este Nombre nos da el valor necesario para abrir tanto nuestro corazón como nuestra boca. Cuando necesitamos oír la verdad, este Nombre nos da fuerza para abrir nuestros oídos y cerrar nuestra boca.

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